Un maestro de secundaria quería transmitir un mensaje a sus alumnos que no solo involucrara datos científicos y mecánicos, sino que también les ayudara en su camino por la vida.
Al iniciar la clase de química el maestro tomó un vaso medidor y le agregó agua hasta el tope. Dirigiéndose a sus alumnos dijo: hoy vamos a aprender un principio universal, vamos a analizar el comportamiento de la materia.
Como bien saben, materia es todo aquello que ocupa un lugar en el espacio, en este vaso he agregado agua corriente.
Mientras tomaba un frasco de colorante, y agregaba una pequeña gota al vaso de agua, que al mezclar tornó el líquido cristalino y lo convirtió en un color como de agua sucia, dijo: ahora tenemos un líquido oscuro y turbio, que podríamos llamar agua sucia. Este recipiente contiene 200 ml de líquido y está totalmente rebosado.
El agua sucia, ocupa todo el recipiente, es decir ocupa todo el espacio del recipiente, por tanto, el vaso está lleno de agua sucia.
El maestro tomó una jarra llena de agua destilada, pura y clara. Empezó a vaciarla en el vaso de agua sucia, el agua que estaba en el vaso empezó a derramarse, pero además de eso, el agua se empezaba a hacer más y más clara. Al terminar de vaciar la jarra de agua destilada, el vaso de agua sucia se había tornado en un vaso de agua clara y cristalina.
¿Qué sucedió aquí? — preguntó a sus alumnos — primero teníamos una mezcla homogénea de agua y colorante, esta mezcla ocupaba todo el espacio que tenía, que en nuestro caso es un vaso de 200 ml. Al no tener más espacio, y agregar más líquido, no tiene otra salida más que derramarse para abrir espacio al nuevo contenido.
En la medida que se agrega más y más del contenido nuevo (agua destilada o agua pura), el agua sucia es desplazada por el nuevo líquido, siendo expulsada por una nueva materia que va a ocupar ese mismo espacio.
¡Ahora tenemos un Vaso de Agua Limpia!
Este principio lo podemos observar en muchas facetas de nuestras vidas, podríamos decir que la vida es un vaso vacío que nos corresponde llenar, el universo nos provee del agua pura, pero nosotros le añadimos el colorante. Cada día estamos llenando nuestro vaso, ya sea agua sucia o agua limpia.
El problema está en que la mayoría de los casos los vasos están llenos de agua sucia. Cada pensamiento negativo, cada mala acción, cada palabra vana, le está añadiendo colorante a nuestro vaso.
Pero lo hermoso de este principio es que no estamos condenados a permanecer con nuestros vasos llenos de agua sucia, como acabamos de ver, cuando decidamos agregar agua pura y limpia a nuestro vaso, con el tiempo desplazaremos el agua sucia.
Esto es un mensaje esperanzador para aquellos que están lidiando con el agua sucia en sus vidas (malos hábitos, pensamientos negativos, crisis personales y financieras, cualquier consecuencia negativa que esté rodeando nuestras vidas…).
Si empiezas desde ahora a agregar el Agua Pura y Limpia (buenos hábitos, pensamientos positivos, buenas acciones, Sabiduría, etc) a tu vida, ten la seguridad que pronto te liberarás del agua sucia.
Tarde que temprano el agua limpia será la materia predominante que ocupa tu espacio, tu vaso.
Si estás leyendo esto, es porque de alguna manera estás buscando mejorar tu vida, significa que estás dando pasos para superarte, seguro ya te has encontrado con algunos obstáculos que te hacen pensar que nunca estarás libre de este o aquél problema. Pero no te preocupes, a lo mejor el agua sucia ya se está aclarando.
¡Pronto tu vaso estará lleno de Agua Pura!.