Dinamarca. El pasado mes de agosto de 2020, la Universidad de Copenhague a través de la Facultad de Ciencias Médicas y de la Salud han identificado el agente causante de activar la grasa marrón en los humanos, lo que permitiría a corto plazo ajustar y mejorar los tratamientos existentes para la obesidad y la diabetes tipo II.
¿Qué es la grasa marrón?
La grasa marrón o también denominada grasa parda es un tejido adiposo (grasiento) marrón, que se activa en el cuerpo humano cuando la temperatura corporal es fría. Esta grasa permite a las personas mantenerse en una temperatura corporal normal mientras está expuesto a temperaturas bajas (muy frías).
CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES DE LA GRASA MARRÓN O PARDA:
- Regula la termogénesis
- Contiene pequeñas gotas de lípidos
- Es densamente inervado
- Posee un alto número de mitocondrias
- Genera la disipación de la energía
¿Qué causa la diabetes tipo II?
Causas de la diabetes tipo II:
- Los adipocitos, hepatocitos y células musculares no responden de manera correcta a la insulina, como resultado el azúcar no es aceptado como fuente de energía en la sangre.
- El azúcar en la sangre no cumple su función natural porque no se utiliza como fuente de energía, sino que se pega en los canales por donde se direcciona la sangre; generando la hiperglucemia.
- Las personas que tienen esta enfermedad por lo general sufren de sobrepeso o ya son obesas.
- El aumento de grasa en el cuerpo dificulta el uso de la insulina de forma correcta generando la diabetes tipo II.
- Es una enfermedad muy común en los adultos mayores.
- Los antecedentes familiares también tienen su participación en la adquisición de esta enfermedad.
¿Qué causa la obesidad?
La obesidad se genera cuando no se queman suficientemente las calorías, es decir, se ingieren muchas calorías que no son quemadas con ejercicios o actividad física. El cuerpo almacena esta energía extra y la convierte en grasa. Además, frente a lo anterior, se le puede sumar las influencias genéticas, conductuales, metabólicas y hormonales. Igualmente, si la persona que está consumiendo muchas calorías más de las que necesita su cuerpo, tiene altas probabilidades de sufrir la enfermedad de obesidad por sus antecedentes genéticos y demás, la padecerá.
¿Por qué conocer cómo se activa la grasa marrón permitiría nuevos y mejorados tratamientos para la diabetes tipo II y la obesidad?
Los científicos que participaron de la investigación han descubierto cómo activar esta grasa marrón en las personas, así, se podrían encontrar diversas formas para activar la grasa parda o marrón con fármacos, ayudando a los seres humanos con estas enfermedades crónicas a mejorar y acelerar su metabolismo, quemando así las calorías innecesarias en el cuerpo.
Estos fármacos estimularían la grasa marrón para que la termogénesis genere receptores beta2-adrenérgicos (b2-AR). Según el Dr. Denis Blondin de CRCHUS, el hallazgo podría explicar por qué la mayoría de los ensayos clínicos, que han intentado inducir a BAT a quemar energía, han funcionado mal.
«Demostramos que tal vez estábamos apuntando al objetivo equivocado todo el tiempo. A diferencia de los roedores, el BAT humano se activa mediante la estimulación del receptor beta2-adrenérgico, el mismo receptor responsable de la liberación de grasa de nuestro tejido adiposo blanco».
FUENTE: SCIENCEDAILY.COM
¿Qué resultados se obtendrían frente a este descubrimiento para los tratamientos en la diabetes tipo II y la obesidad?
- El beneficio de las aplicaciones terapéuticas porque se activaría la grasa marrón o parda para quemar calorías, mejorando la sensibilidad a la insulina y regulando el apetito.
- Lo anterior generaría un proceso de “desbloqueo” en humanos con estas enfermedades, que se utilizará a través de un fármaco que active la grasa marrón y genere la actividad quema grasa y quema calorías. Y así evaluar, el proceso metabólico.
En conclusión, las expectativas frente a estos estudios son muy positivos. Si la teoría de la grasa marrón es correcta beneficiaría a cerca de 460 millones de personas (cifra al cierre del año 2019) que padecen de la enfermedad crónica de la diabetes tipo II, y más de 2200 millones de personas (cifra año 2017) que padecen de sobrepeso en el mundo.
