Para tomar control sobre tus finanzas, comienza por realizar un ejercicio de visualización. Imagina que puedes en forma mágica hacer desparecer todas tus deudas, para encontrarte en una situación de total libertad financiera, porque podrás hacer uso de todos tus ingresos mensuales, cada centavo y peso podrás invertirlo sin restricción ni limitaciones.
Luego imagina que te encuentras placidamente sentado en la casa de tus sueños, manejando el carro que siempre has deseado, y con la familia ideal, tu esposa e hijos todos alrededor tuyo, felices y contentos.
Si te dijeran que el problema de la falta de prosperidad no consiste en no tener mucho dinero, sino en no saber que hacer con lo que se tiene, ¿lo creerías? Otras veces, no solo falta identificar qué hacer con lo que se tiene, sino saber cuidarlo.
Comienza por cultivar la práctica del ahorro, no importa si se trata de un par de centavos o el 10% de tus ingresos, comienza ya mismo a ahorrar, y verás los buenos hábitos financieros que comienzas a sembrar.
Las deudas nunca serán buenas consejeras, intenta eliminarlas, y vivir al día. Por supuesto, existen casos excepcionales como la compra de vivienda, en donde la importante cuantía, exige en muchas ocasiones la financiación de la misma, pero en lo posible busca pagarla en el menor tiempo, para que los intereses no se aumenten.
Contar con un plan de acción, desarrollarlo, supervisarlo, proponerte objetivos reales y retadores, tomar control sobre tus finanzas, y reducir al máximo las deudas, serán algunos de los consejos que te podrán ayudar para lograr la libertad y prosperidad financiera.
No dejes que el destino, los demás, las circunstancias y el entorno, manejen tus finanzas. En vez de ello, toma el control de las mismas, para que sin importar si te equivocas o no, aprendas de los errores, direcciones las estrategias más apropiadas que te lleven a cumplir tus objetivos financieros, de prosperidad y bienestar.
Tomar control, es ser conciente de tu situación financiera, de tus aspiraciones y deseos, de las prácticas y hábitos que te pueden beneficiar, y aquellos que te perjudican, como el mantener deudas inoficiosas.
Fuente: Brian Tracy